Pines
En revista BiCentenario. El ayer y hoy de México, núm. 42. De niños no necesitamos demasiado contexto para movernos y actuar. Sin miedo y allá vamos, sin temerle a lo diferente y a lo desconocido. Eso viene más tarde. La curiosidad nos envalentona y si los que tenemos alrededor, madres, padres, familia, nos dan confianza, elevarán la motivación. A ciegas vamos por descubrir un mundo desconocido que abra puertas a la inquietud y a las expectativas. Una manera de alentarlo nace de mostrarnos cómo somos y qué tenemos, con la ilusión también de recibir algo a modo de intercambio, para atesorar lo inédito, único, emblemático. Del otro lado, el adulto retribuye de igual manera, agita el interés en su proyección de figura singular para quienes lo rodean, el niño que alguna vez fue lo interpreta, aporta una mínima palabra que incite a la comunicación, frases de un mundo lejano a…
Quiero ser niño
Revista BiCentenario. El ayer y hoy de México, núm. 54. Al mundo no le faltan niñas ni niños. Es una verdad de Perogrullo. En 2021 somos algo así como 7 800 millones de habitantes en el planeta. Nada más que en el primer trimestre del año nacieron unos 31 000 000 de bebés. Y aunque las tasas de nacimiento anuales han bajado de manera considerable –algo así como 26% desde que fue tomada esta imagen en la ciudad de México en 1968–, sabemos que del salto de estos números fríos a la posibilidad de satisfacer las necesidades de niñas y niños, se trata de otro cantar. A los adultos nos cuesta ver el drama en los demás. Lo resolvemos con mirar a un costado y esquivarlo. Hay fotos que hablan de esperanza, de éxitos, de la belleza o de la muerte. Pero también hay otras que duelen y desarman. Que no…
La atención de niños y jóvenes al paso de la revolución
Ingrid Noemí López PadillaInstituto Mora En revista BiCentenario. El ayer y hoy de México, núm. 50. Después de la revolución mexicana, el país quedó en un estado deplorable. Las clases populares, campesinos y obreros, principalmente, fueron quienes más lo padecieron ante la falta de recursos económicos. La preocupación de las élites política y social se acrecentó al percatarse de las condiciones en las cuales se encontraba la mayor parte de la población de la ciudad de México. De ahí que, desde principios de la década de 1920, se abordaran muchos de los problemas sociales sin resolver antes de la revolución. Instituciones heredadas del régimen porfirista como la Casa de Corrección, el Hospital General y el Hospicio de Pobres no bastaban para menguar esas dificultades. Los médicos sostuvieron que la salud y la educación de los niños debían ser atendidos y las autoridades tendrían que encontrar los elementos necesarios para el…
Los niños en el festejo del Centenario de la Consumación de la Independencia
Mercedes Alanís / Instituto Mora BiCentenario #6 Teniendo la nación niños sanos y vigorosos, podrá contar en el futuro con ciudadanos capaces de prestarle los mayores servicios Cada sociedad y cada época han delineado su visión acerca de los niños. Los discursos y las imágenes que nos han llegado son testimonios que dan cuenta de cómo los adultos de otro tiempo dotaron de significados a los infantes y cómo los han incorporado a la dinámica social. En las primeras décadas del siglo XX en los países occidentales se generó un creciente interés por la infancia, que se vio reflejado en buena medida por el impulso en el sistema escolar y la práctica médica; algunos de los espacios desde los cuáles se fue moldeando una concepción de la niñez. La disminución de los altos índices de mortandad infantil, la desnutrición y el analfabetismo; la regulación del trabajo a temprana edad, mejorar…
¿Qué esperamos? Televisión comercial y hábitos alimenticios
Somos el primer paAi??s a nivel mundial en sobrepeso y obesidad infantiles.
Correo del lector # 2
Nuestro padre fue uno de los ai???NIAi??OS DE VILLAai???; Ai??l conviviA? con el General Villa en Canutillo, Dgo., hasta su asesinato.
Los niños de Pancho Villa
Uno de los personajes mA?s controvertidos de la revoluciA?n Mexicana es, sin duda, Pancho Villa. En torno suyo se han escrito una buena cantidad de libros que, sin tAi??rminos medios, se han nutrido con historias fantA?sticas que subrayan los rasgos negativos de su carA?cter.