Testimonio de un mural
Paulina Maya Museo Mural Diego Rivera En revista BiCentenario. El ayer y hoy de México, núm. 43. Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central nació en el Hotel del Prado a finales de la década de 1940. El edificio emblemático por las obras artísticas de su interior, quedó seriamente afectado por los sismos de 1985, lo que obligó a una tarea compleja de rescate y traslado de la obra. Hoy se puede continuar apreciando en el Museo Mural Diego Rivera. Antes de la apertura del Hotel del Prado en 1947, el arquitecto Carlos Obregón Santacilia, responsable de su construcción, invitó a Diego Rivera, José Clemente Orozco, Miguel Covarrubias, Gabriel Fernández Ledesma y Roberto Montenegro para que en cada habitación del hotel se realizaran pinturas y se colocaran grabados y esculturas. La finalidad era apoyar el talento nacional, y hacerlo atractivo para los turistas que viajaban en busca del…
El arte del Hotel del Prado
Paulina Martínez Figueroa El Colegio de México En revista BiCentenario. El ayer y hoy de México, núm. 31. Concebido como un espacio amplio y variado para el hospedaje cinco estrellas, y que sus cafeterías, restaurantes y salones fueran centro de discusión de la política, espacios de reunión de las élites mexicanas o pasarelas de empresario, intelectuales, estrellas de cine y deportistas, las paredes de este hotel fueron una exquisita vidriera para exhibir a varios de los mejores pintores y muralistas de los años cuarenta y cincuenta del siglo XX. Uno de los edificios más recordados del México de la segunda mitad del siglo XX es el Hotel del Prado. Construido por el arquitecto Carlos Obregón Santacilia e inaugurado en 1947, tras casi quince años de obra, es uno de los espacios que más ha perdurado en e imaginario de los habitantes de la ciudad de México, incluso tras su demolición…