El arquitecto Félix Candela inventó los “paraboloides hiperbólicos”, estructuras en forma de paraguas cuadrado de cemento con el caño de agua de lluvia en la columna central, que han tenido gran difusión por la belleza de su diseño y por facilitar la construcción en poco espacio de obras ligeras, baratas, resistentes y que podemos apreciar en iglesias, mercados, fábricas, gasolineras y estacionamientos. Madrileño de origen, Candela se exilió en México a raíz de la guerra civil española, haciéndose mexicano en 1941. Fue en nuestro país donde se desarrolló como arquitecto e hizo sus mejores trabajos, entre otros el restorán de Los Manantiales en Xochimilco, el Pabellón de los Rayos Cósmicos en Ciudad Universitaria, el Palacio de los Deportes, la iglesia de la Medalla Milagrosa y la capilla abierta en Lomas de Cuernavaca.