El pulque, conocido también como el “néctar de los dioses”, y durante muchos siglos parte de la dieta del mexicano, se ha podido enlatar y son ya varias las empresas mexicanas que venden buena parte de su producción no sólo en el país, sino en Estados Unidos y la Comunidad Europea. Por mencionar tan sólo un ejemplo, una de ellas dedica 100 hectáreas a la siembra de las cactáceas y produce más de 300 mil latas mensuales de pulque y curados de distintos colores y sabores.