La vida del aviador Lindbergh en México
Ma. del Carmen Collado H. Instituto Mora En revista BiCentenario. El ayer y hoy de México, núm. 66 La hazaña de Charles Augustus Lindbergh de cruzar por primera vez el Atlántico en un aeroplano, lo catapultó a una fama sin precedentes. Invitado a visitar México en 1927, su presencia fue aprovechada por los gobiernos mexicano y estadunidense para acercar una relación por entonces muy tirante. También hizo posible que aquí conociera a la hija menor del embajador de Estados Unidos con quien se casaría. En octubre de 1927 llegó a México el embajador Dwight W. Morrow y se presentó ante el presidente Plutarco Elías Calles. Su llegada trajo, pese a los comentarios negativos de la prensa que lo tacharon de representar a la “diplomacia del dólar”, el inicio de una relación bilateral basada en la cooperación y comprometida con mejorar la imagen de ambos países. Entre las múltiples actividades desplegadas…